Título en español, Atrapado en el tiempo.
Título en latino américa, El día de la marmota.
Pensé que era la que había visto una navidad hace tiempo con mi hermano, que acabamos desesperados con eso de que cada mañana fuese otra vez lo mismo. Pero la que vimos mi hermano y yo era un niño de unos 10 15 años, no recuerdo exactamente, y el día de navidad.
El día de la marmota, me parece una película muy interesante. A nivel de moraleja, de sentimientos y demás. Aunque no termine de entender que el tío se encoñe con la mujer esa (es bastante pedante con eso de si no brindamos por la paz mundial, no follamos), las sensaciones de éste son perfectamente comprensible. Conforme cambian tus intenciones, cambian tus percepciones. Hay momentos en los que te gustaría tener el día perfecto, y hay otros en los que solo te gustaría pasar página.
De cualquier modo, me gustaría tener mi Día de la marmota. Me gustaría que de hoy para mañana sea el puto amo tocando el piano, esculpiendo, dibujando, que haya leído todo lo que me salga del pene y que haya visto todo el cine que pueda. Y de regalo, consigo encontrar las palabras adecuadas para ver a la mujer que quiero, y que encima se enamore de mi.
Lo único que no me gustó fue el final, y la sensación de que es una buena idea, pero que se podría haber llevado a cabo de cualquier forma mejor.
7'5
Esta película la he visto muchas veces. Para que yo aguante una comedia (Es un género que no va conmigo) tengo que encontrarle cierta originalidad y algo, aunque sea en pequeñas dósis, de amargura.
ResponderEliminarLa idea de esta historia tiene mucho de atrayente para mí, el repetir mil veces el mismo día con las cosas buenas y malas que esto trae consigo.
La atemporalidad.
Si por mí fuera... elegiría el mejor día de mi vida y me quedaría para siempre tepitiéndolo, pero sin deseos de salir de esa rueda, sin ninguna intención de escapar de esa serpiente que se muerde la cola.
La historia paralela que más me gustó de esa película es la del pobre anciano mendigo y su triste destino. Tenía que morir y no importaba cuántas formas tuviera el protagonista de luchar contra ese final.
Un beso, Rauko. :-)